jueves, 1 de noviembre de 2012

Ohaguro. (Por: Tsukiko)


Al contrario de los cánones de belleza en los que nos movemos actualmente y que estamos acostumbrados a ver; antiguamente, en la cultura japonesa, el tener una dentadura muy blanca nunca se tomó como un símbolo de belleza.

Fue totalmente al contrario: cuando las mujeres 
llegaban a la madurez, comenzaban a teñir sus dientes de negro mediante una técnica que se llama "Ohaguro" (la madurez en aquella etapa se "alcanzaba" a la edad de 8 o 10 años). ¿Ahora entendéis por qué dije que la moda de Yaeba era algo "normal"?
Para esta técnica, empleaban una fórmula a base de óxido de hierro, sake y té, y cada pocos días era necesario volver a teñir la dentadura, ya que cuanto más negra y brillante se viera, más bonita era la sonrisa. Además, también se consideraba una forma efectiva de proteger los dientes de caries y enfermedades bucales (así que ya sabéis qué hacer para evitar estas cosas).

Este movimiento se inició alrededor de los años 710 y 784. Al principio sólo lo hacían las mujeres de las clases sociales altas (comenzando por la Emperatriz), aunque finalmente esta tradición se extendió tanto que llegó a utilizarse por todas las mujeres como símbolo de que estaban casadas (si, era costumbre que las niñas de entre 8 y 10 años ya tuvieran marido y fueran tratadas como adultas).

Pero por suerte, esta tradición no duró por siempre, pues poco más de 1.000 años después la Emperatriz apareció por primera vez sin su color negro en los dientes, prohibiéndose después la práctica del Ohaguro.

¿Nunca habéis visto a una chica japonesa taparse la boca con la mano mientras ríe? Pues de aquí viene esa manía. Es curioso como ese gesto ha sido heredado hasta nuestros días, como algo cultural.

¡Hasta el próximo artículo! 
さようなら ~

                                                 ----- Tsukiko -----

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